“La vida me ha mostrado que cuando llegan las plagas del tipo que sea, hay un sector muy importante de la población que no solamente no se arrepiente, sino que se endurece, entonces, en una situación como esta, uno se da cuenta de la absoluta vulnerabilidad y de la absoluta fragilidad del ser humano. Es que al final un ente microscópico te coloca a las puertas de la muerte si es que no te empuja al otro lado del umbral de la muerte, y eso hace que algunas personas reflexionen y digan vamos a intentar hacerlo lo mejor posible, etc; pero al mismo tiempo, recordemos nuestra fragilidad y nuestra vulnerabilidad”.

Haciendo un análisis desde el enfoque espiritual de esta pandemia en relación con Dios, el Dr. Vidal dijo:

“En muchas ocasiones el dolor, la desgracia, el sufrimiento es el megáfono de Dios, eso es cierto, es decir que de alguna manera en situaciones como estas Dios está lanzando una advertencia a la gente y eso es algo que no puedo negar, estoy convencido de que es así. Luego está por ver, que efectivamente hay gente que reacciona y se da cuenta de lo que hay, o hay gente que por el contrario sigue la vida loca, que no cabe la menor duda que es la conducta de muchos.

El hecho de que determinadas situaciones puedan ser castigos de Dios, el hecho como tal, y hay referencias en multitud de ocasiones en la Biblia, donde se habla cómo las crisis económicas y guerras y epidemias, etc, a través de las cuales en apariencia tiene una explicación única y exclusivamente de carácter material o de carácter natural, sin embargo, detrás de ello se mueve un fenómeno espiritual y yo creo que eso es algo que no tiene más vuelta de hoja”.