La ausencia de la presencia de Dios, nos remarca constantemente de aquello que hay en nuestro corazón, como la altivez y el orgullo, las mismas que nos alejan por completo de la persona de Jesús.

Mas Dios muestra su misericordia para con nosotros, nos da muchas oportunidades para volvernos a Él para dejar por completo lo que estorba en nuestras vidas que no imposibilita de sentir su presencia, su unción, su respaldo.

Un corazón contrito y humillado, jamás es despreciado por el Altísimo, vengamos ante su trono, postrémonos ante sus pies y arrepintámonos de todo corazón, pidámosle que haga su obra maravillosa en nuestro ser, porque su presencia Todopoderosa, es la pieza fundamental que necesitamos para vivir, para seguir todos los días peleando la buena batalla de la fe.

En el quinto servicio de la Convención Nacional en Bolivia, el Rev. Gerardo Martínez; Supervisor Nacional de Chile, fue el portavoz del Mensaje del cielo, citando el libro bíblico según, Éxodo 33:12, con el tema “La ausencia y la presencia de Dios.”